viernes, 20 de noviembre de 2009

Punto y aparte para las jornadas sobre innovación


Ayer por la tarde se clausuraron las jornadas “La innovación y la creatividad en las Pymes de la Comarca del Guadajoz. Nuevas oportunidades de negocio vinculadas al sector del olivar y el aceite” organizadas por ADEGUA y su Europe Direct y encuadradas dentro de la 12ª edición de las Jornadas del Olivar y el Aceite de Oliva de Baena, que vivirán su broche de oro mañana con la ya tradicional gala “Oro Virgen de Baena”. Sin embargo, no podemos decir que la clausura de las jornadas suponga un punto y final, ya que nuestras actividades no se acaban con ellas. Próximamente iremos hablando de algún proyecto que está en camino y que desarrollaremos dentro de este blog.

La última sesión tocó el tema de los “Segmentos, productos y mercados” a partir del olivar, que remitía por completo al nombre de estas jornadas, ya que la innovación en los modos de producción y en la aplicación de nuevas técnicas fue una constante en las dos charlas que tuvimos ayer. Más que nunca, se trató de lograr dar una vuelta de tuerca, de conseguir una nueva visión de las oportunidades que pueden surgir a través de la investigación aplicada a nuevos usos, productos, mercados y posicionamiento del olivo y el aceite de oliva como centro de atención. Así, se pudieron escuchar distintas voces, distintas experiencias enfocadas hacia la valorización de un producto versátil y dinámico.


Manuel Heredia, del Cortijo de Suerte Alta de Albendín, habló de un nuevo concepto de aceite de oliva que destilaba creatividad en la recogida de la aceituna, el almacenaje, la almazara que construyeron hace algunos años, contenida en un edificio inteligente, y el propio envase del aceite.Toda su filosofía empresarial y su imagen de marca se centra en una palabra fundamentalmente: calidad. Intentando alcanzar la excelencia, a ser posible con variedades de aceituna autóctonas de la zona de Baena, los propietarios de esta empresa familiar están cosechando no pocas menciones. Incluso han presentado sus productos recientemente en los almacenes Harrod’s de Londres, donde contaron con la colaboración de la mejor embajadora posible para ello, su hija, que actualmente realiza prácticas en la capital británica.


Y al hilo de la visión innovadora a la que se hacía referencia antes, la intervención del inmunólogo Vicente García, de la empresa jiennense Bioaveda. Su empresa fabrica a partir de una mezcla de aceites de oliva una serie de productos cosméticos de venta en farmacias y parafarmacias, y en su presentación habló de las propiedades antioxidantes y regeneradoras de esta mezcla, que ya se ha demostrado en pacientes con problemas cardiovasculares y renales.

El producto se comercializa bajo la marca Bioaveda, utilizando como canal de distribución farmacias y parafarmacias 'oHo' (Olive Health Oil). El desarrollo consiste en una mezcla de aceites de oliva virgen procedentes de diversos tipos de aceitunas que tiene efectos muy beneficiosos en enfermos renales. El estudio que llevó a la consecución de la mezcla de aceites supuso alcanzar otros descubrimientos importantes, como que consigue nutrir a los pacientes y aumentar su cantidad de colesterol 'bueno', que suele ser escaso en este tipo de enfermos. Además, evita el estreñimiento y favorece un mejor funcionamiento del tracto digestivo, algo también muy importante para quien padece del riñón.

jueves, 19 de noviembre de 2009

Las mil y una caras de la biomasa

Miércoles 18 de noviembre. Tercera sesión de las jornadas sobre “Innovación y creatividad en las PYMES de la comarca del Guadajoz”. En este caso le tocó el turno a los “Distritos Rurales Sostenibles”, un concepto que se refiere a no desaprovechar los recursos energéticos de los derivados del olivar y de otros recursos naturales. Los tres ponentes de ayer hablaron de biomasa, cada uno abordando el tema desde su trabajo y su experiencia. Pero coincidieron en que la biomasa es riqueza en forma de poda del olivar y otros productos que muchas veces se quedan o tirados en nuestros campos o se queman. Y en eso coincidieron todos, en que quemar en el olivar no trae buenas consecuencias.

El consultor de la Consejería de Agricultura y Pesca José María Álvarez de la Puente desarrolló una ponencia sobre todo lo que podía ofrecer el compostaje de los residuos que genera el olivar, y que consideraba podía ser una buena manera de devolverle al medio ambiente parte de lo que nos ofrece, porque el compost cuenta con muchísimos nutrientes y puede ser un aporte muy bueno y completamente orgánico para el campo.

Por su parte, Yolanda Ramírez, técnica de UPA Jaén, habló sobre los dos proyectos de aprovechamiento de la biomasa que están desarrollando en conjunto con la universidad de Jaén, unos estudios en los que se intenta conocer qué sistemas de recogida son los mejores para tener los mayores rendimientos de la biomasa, con qué máquinas se realiza mejor, en qué condiciones… Estos proyectos son muy útiles tanto para las empresas que trabajan con la biomasa como para los propios agricultores.

Y finalmente, la intervención de Juan Lobo, de la Sociedad Andaluza de Valorización de la Biomasa, aplicaba un poco lo que había dicho su compañera en la mesa al trabajo de campo, ya que en su organismo llevan algunos años trabajando con varios sistemas de recogida y procesado, y aprovechando la biomasa como generador de energía en plantas de toda Andalucía.

Como puede verse, varios enfoques para un mismo producto, la biomasa, y los que estarán por llegar, porque se está trabajando, investigando, probando… para poder darle cada vez un mayor y mejor uso a este sector en expansión.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Las jornadas de innovación llegan a su ecuador

Después de hacer un repaso en los dos primeros días de las jornadas al panorama innovador del olivar, las jornadas “La innovación y la creatividad en las Pymes del olivar” llegan a su ecuador. Atrás hemos dejado las dos primeras sesiones, donde se ha intentado hacer un repaso a aspectos de la realidad del olivar que van desde las posibilidades que hay de desarrollo desde una perspectiva sostenible hasta los tipos de olivares que ha habido y sus distintas capacidades de producción, sin dejar de lado el tema de la PAC, que también ha aparecido en alguna ocasión.

Si el primer día Andrés Luque (del Grupo Andaluz de Estudios) intentaba crear entre los asistentes una conciencia de que en el campo podían hacerse más de lo que se hace por el momento y mejor, otro Luque, Juan Manuel en este caso (Gerente de Alcubilla 2000), apostaba por avanzar en el terreno del olivar por el camino de la producción ecológica.

Pero aún quedan muchos aspectos que ver en torno a un solo árbol, milenario, tradicional de nuestra tierra, como es el olivo. Hoy abordamos los “Distritos Rurales Sostenibles”, un concepto impulsado desde la Asociación para el Desarrollo del Guadajoz y Campiña Este de Córdoba y que aspira a conseguir una “economía descarbonizada”, es decir, producir riqueza para el territorio intentando limitar al máximo las emisiones de CO2 a la atmósfera. Intentarán acercarnos a este concepto los tres ponentes de hoy:

- Juan Lobo (Sociedad Andaluza de Valorización de la Biomasa).

- Yolanda Ramírez (técnica de la UPA en Jaén y responsable de los proyectos de aprovechamiento de la biomasa), en sustitución de Agustín Rodríguez.

- José Mª Álvarez de la Puente (investigador y consultor).

Mañana jueves tendremos la clausura de estas jornadas atendiendo a los distintos segmentos del olivar, a sus productos y a los servicios que genera, y tendremos dos visiones diferentes de lo que se puede hacer a partir de un olivo, desde un aceite con un nuevo diseño y con un nuevo concepto hasta productos farmacéuticos derivados del aceite.

El futuro del olivar pasa por hacerlo sostenible


Ayer vivimos la segunda sesión de las jornadas “La innovación y la creatividad en las Pymes del olivar” con unas ponencias bastante diversas para tratar el tema de la sostenibilidad del olivar. Con la vista puesta en el compromiso con la sostenibilidad ambiental, social y económica, se planteó una tertulia con tres invitados con relación personal y profesional con cada uno de estos ámbitos. Algo que tuvieron en común los tres ponentes fue que consideran que el olivar del futuro debe ser un olivar sostenible, que conviva en equilibrio con el medio ambiente que le rodea. Luego ya cada uno aportó su visión particular, como participantes activos de esta realidad.

En primer lugar, el representante de UAGA Córdoba Francisco Garrido hizo referencia a la nueva ley del olivar que se está tratando en Andalucía, que próximamente se debatirá en el Parlamento Andaluz, y a la necesidad de regular las ayudas que se conceden actualmente al olivar tradicional, ya que, según recalcó, un número pequeño de agricultores acaparan gran parte de las ayudas, más de la mitad.

Por su parte, el gerente de Alcubilla 2000, Juan Manuel Luque, contó su experiencia dentro de una almazara ecológica, y por qué él y su familia llevan 10 años apostando por esta forma de producción. Además hizo referencia a un concepto muy interesante en la actualidad, a pocos días de que se celebre la Cumbre de Copenhague, que revisará las cifras y los objetivos del Protocolo de Kioto. Este concepto es el de la huella ecológica, que es nada menos que la cantidad de CO2 que se genera al producir un bien o un servicio, y cómo se aspira a que esa cantidad, en el caso del aceite de oliva, baje cada vez más.


Por último, el investigador José Ramón Guzmán basó su ponencia en la gran variedad de tipos de olivar que hay en Andalucía, cada uno con sus necesidades, sus problemas y sus particularidades. Al desarrollar su trabajo en el ámbito de la universidad, Guzmán se mostró como un gran conocedor de los campos andaluces, sobre todo de los olivares, que estudió en profundidad para elaborar su tesis doctoral. Su obra El palimsepsto cultivado. Historia De Los Paisajes Del Olivar Andaluz es muy interesante para conocer no sólo las características de los olivares en diferentes zonas de Andalucía, sino para intentar comprender de qué manera han llegado a como son actualmente.

martes, 17 de noviembre de 2009

Andrés Luque abre el telón de las jornadas con una ponencia sobre I+D+i


"El buen uso de la tecnología es la llave del futuro", dijo ayer Andrés Luque en una de sus comparecencias ante los medios de comunicación previas a la inauguración de las jornadas "La innovación y la creatividad en las Pymes de la Comarca del Guadajoz", que vivieron ayer su primera sesión con la presencia de la Concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de Baena.

Frente a asistentes de diferentes ámbitos económicos de la comarca de Baena, Luque habló en términos de honestidad en el tajo, honradez y trabajo duro para conseguir cambiar los modos de producción en ámbitos tan variados como plataformas de tratamiento de residuos o centrales nucleares, y sostuvo que aplicar sistemas de innovación, desarrollo e investigación al olivar era no sólo posible, sino necesario. Y es que, según dijo durante la ponencia, hace falta aprovechar todos los recursos, “tanto los que se usan como los que no, porque un residuo que se tira es dinero que se pierde”.

Luque abogó por la unión de fuerzas para que la voz todos los sectores sea una sola. Así, mediante el acuerdo entre empresas, se podrían definir y desarrollar proyectos viables que desembocarían en dinero para realizar inversiones, y ahí es donde entra en juego la administración pública, donde van a parar todas las voces y quien cuenta con los fondos para realizar esos proyectos.

Concretamente en la comarca de Baena existe la posibilidad de eliminar las balsas de alperujo. ¿Cómo? Aprovechando esos residuos procedentes de la fabricación del aceite de oliva, creando una industria eficaz para sacar de ahí toda la energía posible y exportarla, ya que las balsas de alpechín suponen a su vez una gran cantidad de dinero que no se aprovecha.

Por último, Luque habló de la biomasa como una materia de altísima calidad que aún tiene mucho camino por recorrer, y comparó su explotación con la de la industria petroquímica en el sentido tanto de posibilidades de obtención de distintos materiales como de rentabilidad. Y es que si el petróleo resulta tan rentable para el hombre, ¿por qué no la biomasa, que podemos encontrar en cualquiera de nuestros campos?